¿Sustituyen los robots tareas inherentemente humanas como son la comunicación, la empatía y el acompañamiento?
Hace 10 años, con la intención de visitar un hospital puntero en calidad asistencial y seguridad clínica, tuve la oportunidad de realizar una estancia en el Red Cross Hospital de Nagano, en Japón.
Al llegar a la residencia de estudiantes lo primero que hice fue comentar sobre estos robots a los compañeros y a mis familiares. Entonces imaginé que los usuarios/as del hospital harían lo propio. La cosa es que en aquel hospital vivían inmersos en la cultura de la seguridad clínica que había ido a buscar y a estudiar, pero el primer impacto fue la existencia de unos robots de dudosa utilidad.
Ayer leí este artículo sobre un prototipo de robots que se quieren introducir en hospitales catalanes con el objetivo, según el artículo, de "acompañar o educar a los pacientes".
Mi opinión sería muy diferente si estos robots pudieran realizar técnicas de enfermería tales como obtenciones de muestras o inserciones de catéteres indoloros con precisión o si éstos robots mediante pruebas no invasivas y análisis de los datos y Big Data pudieran realizar diagnósticos 100% fiables. Pero no, estos robots pretenden substituir funciones tan inherentemente humanas como la comunicación, la educación/formación y el acompañamiento.
Una vez allí tomé un café de máquina tipo vending para combatir el jet lag. El café era caliente y a su vez frío e impersonal pero era más rápido y económico que el de cafetería y la barrera idomática con el camarero no era fácil.
Tras el café me dirigí a la entrada del hospital. Junto con las máquinas de cobro por la atención recibida, una serie de robots aguardaban por nuevos usuarios/clientes que ingresaban. Estos robots acompañaban al usuario/a y familia a la habitación y explicaban cosas elementales tales como el uso del televisor, medidas de evacuación, encendido de luces y otras explicaciones elementales más propias de hostelería que de cualquier sanitario/a.
Tras el café me dirigí a la entrada del hospital. Junto con las máquinas de cobro por la atención recibida, una serie de robots aguardaban por nuevos usuarios/clientes que ingresaban. Estos robots acompañaban al usuario/a y familia a la habitación y explicaban cosas elementales tales como el uso del televisor, medidas de evacuación, encendido de luces y otras explicaciones elementales más propias de hostelería que de cualquier sanitario/a.
Ayer leí este artículo sobre un prototipo de robots que se quieren introducir en hospitales catalanes con el objetivo, según el artículo, de "acompañar o educar a los pacientes".
Yo no digo que una máquina no pueda acompañar pero permitidme que dude de la capacidad de un robot para comunicarse y dejadme dudar de la capacidad (por el momento) de un robot para empatizar (que no simpatizar). Claro que una máquina vending puede sustituir a un camarero y "servir" un café, pero no esperemos un "buenos días", ni el olor a café molido de una cafetería.
En los primeros años del siglo XIX apareció el ludismo; un fenómeno social en el que los obreros de las empresas textiles principalmente de Inglaterra y el levante español destruían telares industriales introducidos durante la revolución industrial, un acto de protesta por el remplazamiento de trabajadores que estas máquinas suponían.
No soy ludista, de hecho estoy convencido de que el profesional sanitario del futuro será una persona muy "knowmada" dentro de estructuras cada vez más líquidas en las que necesitaremos el uso de cuanta más tecnología mejor para adaptarnos a un entorno de cambio constante.
Tampoco soy un antiavance, simplemente cuestiono determinados "avances" y me pregunto por un lado si son tan buenas inversiones y por otro si aportan un extra, un valor añadido a lo que aporta un humano.
No estoy en contra de la tecnología, pero el progreso no puede ser la tecnología sino la meta que esta nos facilita; entendiendo la tecnología como una mera herramienta para el cambio, siendo el cambio y la búsqueda del cambio lo realmente importante.
No estoy en contra de la tecnología, pero el progreso no puede ser la tecnología sino la meta que esta nos facilita; entendiendo la tecnología como una mera herramienta para el cambio, siendo el cambio y la búsqueda del cambio lo realmente importante.
"El profesional sanitario del futuro será una persona muy "knowmada" dentro de estructuras cada vez más líquidas en las que necesitaremos el uso de cuanta más tecnología mejor para adaptarnos a un entorno de cambio constante"
Mi opinión sería muy diferente si estos robots pudieran realizar técnicas de enfermería tales como obtenciones de muestras o inserciones de catéteres indoloros con precisión o si éstos robots mediante pruebas no invasivas y análisis de los datos y Big Data pudieran realizar diagnósticos 100% fiables. Pero no, estos robots pretenden substituir funciones tan inherentemente humanas como la comunicación, la educación/formación y el acompañamiento.
"El progreso no puede ser la tecnología sino la meta que ésta nos facilita; entendiendo la tecnología como una mera herramienta para el cambio, siendo el cambio y la búsqueda del cambio lo realmente importante"
Únicamente una duda: con los hábitos de vida de la sociedad moderna, con cada vez más horas dedicadas al puesto de trabajo y menos al cuidado de nuestros familiares y con profesiones sanitarias cada vez más tecnificadas. ¿Estamos las sanitarias dejando de lado el acompañamiento? Tendrán cabida en un futuro estos robots? ¿Utilizaremos la tecnología como sustitutos para acompañar a los usuarios y a nuestros familiares?
A caso no lo hacemos ya?
A caso no lo hacemos ya?
@josepmavazquez
Este post me sugiere este tema "technologyc" del disco Human after all de los Daft Punk
Interesante reflexión.
ResponderEliminarQué pasaría con la enfermería si los robots fuesen capaces de ejecutar esas técnicas de las que hablas? Cual sería su lugar en el mundo? Nos enfocamos en su parte más humana? No habría que ir buscando ese nuevo lugar para estar preparados el día que llegue?
saludos
De alguna manera es lo que espero.. que alguien o "algo" nos meta caña, para ver por dónde nos da o si nos ponemos alguna pila...
EliminarGracias por compartir tu experiencia!!! ;)
Espero que no necesitemos pilas o querrá decir que nos han sustituido ya las máquinas ;) pero si este marco de competencia con las máquinas será lo que nos de caña y nos haga reflexionar sobre qué papel puede ser enfermeria exclusivo y darle valor y ciencia.
EliminarMi diagnóstico es que hace unos años que la sociedad en general y las enfermeras en particular se han centrado en modelos biomédicos y tecnicistas abandonando las tareas propias del cuidado, con el riesgo que esto comporta de intrusismo por parte de otros profesionales y por qué no de robots en un futuro.
ResponderEliminarPor otro lado cuestiono si todo lo que es tecnología supone un avance tecnológico o estamos en una carrera de ver quién introduce más chismes sin que estos originen un cambio en las empresas, los grupos o la salud.
Gracias por vuestras aportaciones. ;)
Parece que en nuestro entorno aún no somos capaces de pensar en ello y menos por tanto prever que los robots llegarán, un asunto que en Japón o Finlandia por ejemplo está siendo casi normalizado. Ya hay estudios y revisiones al respecto en los que investigan no solo el grado de aceptación sino los factores que podrían mejorar o predisponer a la aceptabilidad de los mismos. Algo que deberíamos ir al menos considerando, el futuro está ahí y cómo nos adaptaremos.
ResponderEliminarGracias Zulema. Como rezo en otra entrada "Somos carne de intrusión". Si no somos capaces de valorar nuestra actividad y de medir sus repercusiones, otros profesionales u otros sistemas robóticos harán estás actividades (de mejor o menor manera).
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